el cine ¿sigue siendo el cine?
cuando yo era chico (no hace tanto y hace bastante)ir al cine implicaba toda una ceremonia ,se elegia la pelicula casi con precision quirurgica y una vez encontrada se salia munido de toda una parafernalia acorde al recinto :caramelos,algun sandwich,la infaltable cantimplora con algun bebestible y golosinas varias pero no se concebia a un ser humano bien nacido ,no entrar a ese recinto sagrado sin al menos una caja de mani con chocolate ,que aunque descreo que haya algun tratado al respecto ,quien acude al cine sin una cajetilla de mani con chocolate es al menos sospechoso.
obviamente que en el cine vendian todas esas pitanzas pero habia un mito bastante popular solventado por madres,tias y abuelas que decian que los precios eran inalcanzables,conclusion uno miraba como algunos privilegiados adquirian golosinas e imaginaba detras de esas escenas a personas de holgado pasar economico (el mismo mito sucedia con las playas y los vendedores ambulantes pero es otro tema)curiosamente de grande a mi nunca se me dio por preguntar cuanto cuesta una caja de mani con chocolate en la sala ¿se pagara en euros?¿pediran titulo de nobleza?
habran de saber las nuevas generaciones que antes el cine era en continuado y era mas que frecuente mirar dos y hasta tres peliculas y si una habia gustado ,era normal quedarse a ver la repeticion por lo cual las personas si o si debian llevar tanta comida.
los cines tenian una atmosfera tipica entrañable ,luego vinieron los malos tiempos ,la video casetera confino a la gente a la casa y se reemplazo magia por comodidad ,selectividad por cantidad ,no era raro que alguien ni bien se compraba la video mirara hasta cinco peliculas por dia despues el cable y su oferta lujuriosa ,y los cines de barrio se transformaron en garages o en recintos evangelistas .
en los noventa se hicieron nuevos complejos pero sin esa magia de antaño ,lugares asequibles a la cultura americana ,comodos si pero despersonalizados ,con demasiado plastico y demasiado pochoclo de maquina ,la ceremonia del cine dejo paso al consumo y a esa cierta sensacion de estar por un ratito en el primer mundo pero solo por un ratito.
no existe calle mas o menos transitada donde no haya vendedores de peliculas truchas con una oferta que de tan grande por mas que alguien renunciara a ejercer todo tipo de actividad ,no le alcanzaria el tiempo para ver todo lo que se exhibe.
los corazones sensibles saben que siempre sera la calidad de la trama ,el guion ,las buenas actuaciones y las direcciones atinadas las que haran que una pelicula sea buena o mala pero el cine ,amigos ya no es lo que era.
buenas tarde
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